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El amor más fuerte te lo dan tus hijos pequeños
Esas sonrisa, ese beso y esas mil veces que te llaman mamá son de los detalles mas increíbles que puede vivir una madre
Esa conexión especial que existe entre una madre y un hijo se vive toda la vida, pero cuando se da el amor más fuerte y más honesto es cuando ellos son aun pequeños. Llamarte tantas veces mamá como sea posible era parte de la alerta de un hijo buscando a su madre.
Los pequeños cuando se sienten tristes recurren a mamá con frecuencia para sentirse seguros y amados, Son espontáneos capaces de poner de buen humor a una madre que se siente a veces estresada por el trabajo.

Son el antídoto perfecto cuando el día estuvo muy pesado, un solo abrazo de los hijos pequeños, hacen que el día se vuelve noche y la noche se vuelva día. Experimentar ese intercambio de cariños, besos y amor maternal es de las mejores magias que existen.
Los pequeños empiezan a caminar, a balbucear o a dibujar, y estos son de los acontecimientos más importantes que puede experimentar una madre atenta con sus bebés que empieza crecer y a explorar el mundo.
¿Que dices de las caídas?. Estas son de las cosas que más hacen llorar a un bebé o a una madre y hace que el abrazo calme los nervios de un niño y al mismo tiempo hace que la madre sepa que todo está bien.
Van creciendo y aunque a veces se enojaban siempre sale ganando el amor verdadero, puro y sincero que hay entre el niño y la madre. Ese mundo en donde los niños tiran los juguetes, rompen cosas o no quieren verduras es uno de los más enriquecedores de las madres.
Los niños te buscan para un abrazo
Quieren un beso, una recompensa o simplemente quiere estar en medio de mamá y papá en la cama. Quiere su postre favorito, que lo cargues y le digas que lo amas.
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